Yo me afeito en la ducha. Soy lo que los anglosajones llaman un “shower shaver”.
Normalmente utilizo brocha y jabón. Pero hoy os voy a hablar de una crema de afeitar para usar sin brocha. De una crema que no hace espuma. Que viene lista para extender con la mano y dar un masaje preparatorio con los dedos.
Se trata de la crema Razor MD, concretamente la de aroma Herbal. La presentación es en tarro de tamaño grande, 224 gramos, 95 mm de diámetro y 50 mm de alto. El tarro viene convenientemente sellado para nuestra tranquilidad y seguridad.
En la ducha, con la cara mojada, esta crema se extiende perfectamente con los dedos. La textura es como de pasta dentífrica, o algo menos espesa. Basta la cantidad de una cucharilla de café bien colmada para cada pasada (no me gusta introducir los dedos en los tarros de crema para no contaminarlos, y suelo usar cucharillas o espátulas). El aroma y la sensación de frescor en la cara son buenos, muy agradables. La crema no hace espuma, pero deja una capa muy deslizante y protectora para la maquinilla de afeitar clásica. Con la Gillette Fusion multihojas, funciona perfectamente, y no emboza el espacio entre cuchillas y el afeitado es igualmente eficaz y placentero. Por tanto, creo que es una buena opción para las personas que se afeitan en la ducha (o frente al espejo) y no usan brocha. Realmente mucho mejor, pero de largo, que la espuma o gel de bote.
Como os digo, el aroma es genial, me encanta. Se percibe un poco de lavanda y otras cosas. Y si durante el afeitado se comporta estupenda-mente en cuanto a protección y deslizamiento, el post-afeitado que proporciona es también muy bueno, por encima de la media, en mi opinión. Deja la piel muy tersa e hidratada. Después de su uso, la loción post-afeitado de cualquier marca hace bien su trabajo.
Yo no suelo usar estos productos, pues me gusta el ritual de la brocha. Pero sólo puedo hablar bien de ella. Si me fuera de viaje y no quisiera llevar brocha, esta crema sería un candidato ideal a viajar en mi neceser, aunque sería mucho más cómodo un tubo que el tarro, que no es pequeño.
He aprendido a usarla bien, y a economizarla. Un truco que os puede ser útil es no enjuagar la maquinilla con agua para eliminar la crema de la misma, sino sacudirla sobre la otra mano, de lado, para volver a aplicar la crema de nuevo en la cara para pasadas sucesivas de retoques o cambios de dirección.
Saludos, el Buen Doctor.